Erre que erre, el burrero arreaba al burro cazurro,
Arre que arre , arreaba el arriero al burro.
Y arreando, correteando, carreteando y burreando
subían al monte arriero, carreta y burro. El trasgo y el troll
Trae el trasgo el trigo a través del trigal,
y un troll traicionero le roba el cereal.
El trasgo travieso trota tras el troll
y trota que te trota, trepa que trepó,
trata de atraparlo pero se escapó.
Traía el trasgo el trigo a través del trigal
pero el troll traicionero le robó el cereal.Lula la lechuza
y allá, en el llano, aulla el alano.
Lula, la lechuza, aletea,
se lanza, se avalanza y alardea.
Y en su laurel oloroso, Manuelo, el mochuelo, contempla, alelado,
el aleteo de la lechuza, el álamo dorado,
el aullador alano y el llano alistado.La nana
La nana de Ana le canta a la luna,
a la luna le canta la nana de Ana,
una nana, nanita, nana,
una nana le canta a la luna
la anciana nana de Ana.El elefante
Un elefante, elegante, enervante y exultante,
Un elefante, elegante, enervante y exultante,
alzando la trompa amenazante,
desfilaba acechante,
siempre adelante.
Rumbo al río refrescante desfilaba
un elefante, elegante, anhelante y exultante.La serpiente
Silba la serpiente y susurra sapiente.
Sibilina y sigilosa, silba la serpiente.
Susurra y suspira suspiros susurrantes,
sisea, sosegada, sesuda y sibilante,
seiscientos sesenta y seis susurros supirantes.La fiesta
El ñandú es un ñoño, decía el ñu,
menuda ñoñería pensaba el ñandú.
El ñandú, desdeñado, amaña una fiesta,
con piñata, con ñame y su buena peineta.
Invitó al ruiseñor y a la cigüeña,
a la vicuña, a la piraña y hasta a una zarigüeya,
e incluso la araña se apaña un puesto con maña.
Tan sólo olvidó el pobre ñandú
invitar a su cabaña al oso ojeroso y al joven ñu.
Y así, a la mañana, tras la maraña,
con muchas legañas bajo las pestañas,
comentaba desdeñoso el ñu:
el ñandú es un soso,
lo sabemos yo y el oso.
La merienda
menuda merienda que se zampó.
Mirando la madarina Macario pensó
que una manzana sería mejor.
Menuda mandarina María merendó,
menuda manzana Macario se zampó.
Mirando la mandarina y la manzana, Mariela opinó
que un melocotón sabría mejor.
Menuda mandarina María merendó,
menuda manzana Macario se zampó,
menudo melocotón Mariela devoró.
Mirando la mandarina, la manzana y el melocotón
Marcelo pensó que un membrillo estaría mejor.
Menuda mandarina María merendó,
menuda manzana Macario se zampó,
menudo melocotón Mariela devoró,
menudo membrillo Marcelo tragó.
Y tras la merienda nada quedó:
ni mandarina ni manzana, ni membrillo ni melocotón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario